Por Vivian Franco, abogada ABOFEM Wallmapu
El día de ayer, el Tribunal Oral en lo Penal de Temuco condenó al alcalde de Lautaro, Raúl Schifferli, a 4 años de cárcel – en la modalidad de libertad vigilada, es decir en su casa- por el delito consumado de abuso sexual a una mujer que le pidió ayuda social en medio de la crisis económica de la pandemia. En la sentencia, el Tribunal también impuso la pena accesoria solicitada por la fiscalía que lo inhabilita para ejercer cargos públicos por el tiempo que dure la condena.
Considerando que los municipios y sus funcionarios/as no pueden hacer defensas corporativas o institucionales a la persona del alcalde – que es distinta al cargo – y que la igualdad sustantiva es un derecho muy mal comprendido por las autoridades regionales, es necesario recordar que la transversalización de la perspectiva de género es un concepto antiguo y que viene acuñándose al menos desde 1975 en diversos instrumentos y acuerdos de los estados.
La perspectiva de género en el ámbito judicial apunta al litigio estratégico, a la técnica jurídica integral, a métodos de análisis para “equiparar la cancha” entre agresores y víctimas que están en posiciones desiguales de poder – como es el caso – permitiendo aplicar la igualdad ante la ley, corrigiendo asimetrías y estereotipos en todo el proceso y particularmente, en la etapa de valoración de la prueba, la que debe ser aplicada en los juicios desde el poder judicial aún si las partes no la invocan[1].
La postura del movimiento feminista frente a estos casos es antigua y conocida: la más contemporánea en el ámbito nacional se articuló desde la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres, que revitaliza la campaña “Agresores de mujeres: ¡fuera de cargos públicos![2]”. En el ámbito local, las organizaciones feministas territoriales instalamos hace años la urgencia de impulsar agendas locales con enfoque de género, que impidan a depredadores y abusadores sexuales el ejercicio de cargos públicos, sí, pero especialmente: una ordenanza para municipalizar todos los derechos de las mujeres[3]. Desde ahí, que la semana pasada el movimiento social feminista nuevamente fue el primero en reaccionar en la dirección correcta exigiendo la renuncia del edil[4]; a lo que posteriormente se sumó la Seremi de la Mujer, mujeres de diversos partidos y que terminó reabriendo la discusión sobre derechos de las víctimas en el poder local y la impunidad con que gozan los abusadores funcionarios públicos, en el marco de la transversalización del enfoque de género.
En el ámbito político regional, resalta – aunque ya no sorprende – el hecho de que todos los casos conocidos sobre alcaldes y funcionarios depredadores sexuales en municipios de Wallmapu corresponden precisamente a sectores ideológicos autodenominados “defensores de los valores tradicionales de la familia”; conservadores, cristianos y que se oponen al feminismo y a los derechos de las mujeres.
El caso de la alcaldía de Lautaro no es el único en la región. Está también entre los más conocidos el caso del alcalde de Renaico, Juan Carlos Reinao; el alcalde de Cunco, Alfonso Coke; del alcalde de Cholchol, Luis Huirilef y del director del Departamento de Salud Municipal de Angol, Faustino Parra, todos casos con aristas administrativas, laborales y penales[5]. Todos estos casos son protagonizados por hombres políticos vinculados a la Democracia Cristiana, al Partido por la Democracia, o bien son independientes que trabajan públicamente de la mano de la derecha y la ex concertación. ¿Qué tienen en común los denunciados? Todos militan en sectores políticos atravesados históricamente por la negación de los derechos de las mujeres, ¿qué ganan con el discurso antifeminista? seguir acumulando poder político patriarcal mientras continúan abusando de nosotras.
En lo global, esta sentencia se dicta en un contexto de alta proliferación de discursos misóginos desde los representantes políticos que están invisibilizando y naturalizando la violencia contra las mujeres; suprimiendo derechos en torno a la educación en igualdad, instalando discursos para controlar el cuerpo de las mujeres y en definitiva, negando derechos bajo la excusa de los supuestos valores tradicionales y la protección de la familia. En Chile, lo propio explotó a propósito de la brutal campaña de desinformación de los mismos sectores políticos antiderechos, que terminaron naturalizando la asignación de responsabilidad a las víctimas de violación y sosteniendo que queríamos constitucionalizar el asesinato de bebés; y esta semana nuevamente a propósito de la discriminación transfóbica sufrida en el seno del trabajo legislativo por la diputada en Emilia Schneider[6].
Las organizaciones feministas del territorio y en particular, desde la asociación de abogadas feministas ABOFEM Regional Wallmapu, reafirmamos nuestro compromiso concreto con las víctimas de este caso y todos los casos de funcionarias afectadas. En primer lugar, para seguir impulsando la ordenanza modelo que municipalice el Convenio de Belem do Pará a fin de transversalizar correctamente la perspectiva de género en las comunas, comprendiendo que los meros protocolos de denuncia son insuficientes y, en segundo lugar, para apoyar a la población en torno a las diferentes vías de denuncia, no sólo respecto de los abusos en sí, sino de otras vulneraciones de derechos que ocurren en estos contextos y de faltas funcionarias en el caso de defensas institucionales o desde los funcionarios/as cercanos a los agresores sexuales.
Desde los municipios, debe comprenderse que la igualdad sustantiva no es crear meras oficinas o departamentos de género que se limiten a ejecutar recursos ajenos; la transversalización del enfoque de género debe planificarse seriamente en procesos a largo plazo, pues las acciones sectoriales – como sólo abordar protocolos de denuncia o contra el acoso callejero – no tendrán efectos sostenibles por cuanto no apuntan a transformar desigualdades estructurales. Aportar por la igualdad de género es apostar al cambio del paradigma político municipal, y la municipalización del convenio de Belem do Pará es el instrumento idóneo para ello.
[1] http://secretariadegenero.pjud.cl/index.php/capacitacion/9-contenido/proyectos/24-cbp
[2] http://www.nomasviolenciacontramujeres.cl/agresores-de-mujeres-fuera-de-cargos-publicos/
[3] https://www.biobiochile.cl/noticias/nacional/region-de-la-araucania/2021/08/10/agrupaciones-feministas-demandan-mayor-inclusion-de-mujeres-en-municipalidad-de-temuco.shtml
[4] Las organizaciones firmantes de dicha declaración fueron Abofem Wallmapu, Colectiva Llanca Newen de Victoria, La Grupa de Collipulli, Colectivo Feminista de Melipeuco, Coordinadora Feminista 8M de Angol, Con las Amigas y en la Casa de Temuco, Feministas Organizadas de Curacautín, Compañía de Teatro Lomas Coloradas de Malleco, Asamblea Feminista Yanequen, Galvarino, Fundación Sirona, Asamblea Feminista de Cunco, Feministas Organizadas de Traiguén, La Morada de Curacautín, Colectivo Feminista de Renaico y Modatima Wallmapu.
[5] https://www.biobiochile.cl/noticias/nacional/region-de-la-araucania/2022/09/27/tras-condena-al-alcalde-de-lautaro-fiscalia-investiga-denuncias-contra-otros-tres-jefes-comunales.shtml
[6] https://www.emol.com/noticias/Nacional/2022/10/05/1074742/delacarrera-polemica-congreso.html